SALUD MENTAL

 

¿PORQUÉ ES TAN IMPORTANTE LA SALUD MENTAL?





La salud mental es de suma importancia puesto que, al hablar del concepto y significado de “salud”, se hace referencia al buen estado y equilibrio de la salud tanto física como mental. Si no hay salud mental no se puede hablar de salud.

La salud mental está determinada por diferentes factores psicosociales, determinadas situaciones como lo es la relación dentro del entorno en que nos desarrollamos, aspectos sociales y culturales, así como la relación que se tiene con la familia y la comunidad van a influir en gran medida en el grado de salud que se tenga.

El daño de esta salud mental nos puede llevar al desarrollo de trastornos o padecimientos psicológicos incluso psiquiátricos.




¿QUÉ ES LA SALUD MENTAL?

La salud mental es un estado de bienestar en el que la persona realiza sus capacidades y es capaz de hacer frente al estrés normal de la vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad. En este sentido positivo, la salud mental es el fundamento del bienestar individual y del funcionamiento eficaz de la comunidad.

La salud mental y el bienestar son fundamentales para nuestra capacidad colectiva e individual de pensar, manifestar sentimientos, interactuar con los demás, ganar el sustento y disfrutar de la vida. Sobre esta base se puede considerar que la promoción, la protección y el restablecimiento de la salud mental son preocupaciones vitales de las personas, las comunidades y las sociedades de todo el mundo.







Determinantes de la salud mental



La salud mental individual está determinada por múltiples factores sociales, psicológicos y biológicos. 

Las presiones socioeconómicas persistentes constituyen un riesgo bien conocido para la salud mental de las personas y las comunidades. Las pruebas más evidentes están relacionadas con los indicadores de la pobreza, y en particular con el bajo nivel educativo.

Dentro de los factores que pueden afectar el grado de salud mental se encuentran:
  • Las condiciones de trabajo estresantes
  • La exclusión social
  • La inseguridad
  • La desesperanza
  • El rápido cambio social
  • Riesgos de violencia
  • Los modos de vida poco saludables 
  • Problemas que afectan la salud física.

También hay factores de la personalidad y psicológicos específicos que hacen que una persona sea más vulnerable a los trastornos mentales. Los trastornos mentales también tienen causas de carácter biológico, dependientes, por ejemplo, de factores genéticos o de desequilibrios bioquímicos cerebrales.






                        Promoción y protección de la salud mental



La promoción de la salud mental consiste en acciones que creen entornos y condiciones de vida que propicien la salud mental y permitan a las personas adoptar y mantener modos de vida saludables.

Un ambiente de respeto y protección de los derechos civiles, políticos, socioeconómicos y culturales básicos es fundamental para la promoción de la salud mental.





Son interesantes las actividades o acciones que nos pueden llevar a mejorar nuestra salud mental, encontrando dentro de ellas el tener un buen hábito alimenticio, hacer deporte, la conservación de buenas relaciones interpersonales, evitar toxicomanías, el dormir las horas adecuadas (8h), la realización de actividades sociales recreativas y el fomento de la lectura. 









La promoción de la salud mental depende en gran medida de estrategias intersectoriales. 




Entre otras formas concretas de fomentar la salud mental se pueden mencionar, por parte de la OMS, las siguientes:

  • Intervenciones en la infancia precoz

  • Apoyo a los niños (programas de creación de capacidades y programas de desarrollo infantil y juvenil)

  • Emancipación socioeconómica de la mujer (mejora del acceso a la educación y concesión de microcréditos

  • Apoyo social a las poblaciones geriátricas (Iniciativas para hacer amistades y centros comunitarios y de día)

  • Programas dirigidos a grupos vulnerables, y en particular a las minorías, los pueblos indígenas, los migrantes y las personas afectadas por conflictos y desastres

  • Actividades de promoción de la salud mental en la escuela 

  • Intervenciones de salud mental en el trabajo 

  • Políticas de vivienda 

  • Programas de prevención de la violencia 

  • Programas de desarrollo comunitario 

  • Reducción de la pobreza y la protección social para los pobres

  • Legislación y campañas contra la discriminación

  • Promoción de los derechos, las oportunidades y la atención de las personas con trastornos mentales





Presupuestos públicos para salud mental



Según las últimas estimaciones de la OMS, los gobiernos destinan menos del 2% de sus presupuestos sanitarios a la salud mental. Además, la mayor parte del gasto declarado en salud mental se destina a los hospitales psiquiátricos, excepto en los países de ingresos altos, donde la cifra ronda el 43%.

Los problemas mentales requieren de mucha atención puesto que si no son atendidas pueden llegar a agravarse y por ende generar más gasto de recursos. 

Las enfermedades psiquiátricas resultan ser de las enfermedades que mayores gastos económicos tienen y de las que ocasionan más años de vida por enfermedad perdidos

El atender a tiempo y normalizar el cuidado de la salud mental, será de gran ayuda a la prevención de finales inesperados o fatales, hablando de la posibilidad de desarrollo de afecciones mentales e incluso la muerte.

 






                                         ¡10 de octubre Día Mundial de la Salud Mental!













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